El estruendo atronador del Carnaval ha resultado efectivo: la primavera no puede hacer oídos
sordos a la llamada. La nieve de las cumbres ha comenzado a derretirse y la extensa red de
regatas y pequeños arroyos comienza a despertar a la vegetación. Poco a poco todos los rincones empiezan a florecer y, dejando atrás el silencio del invierno, los animales comienzan
a llenar el aire de sonidos. Los días van alargándose y nos dan la oportunidad de escudriñar los diferentes recorridos y senderos de Baztan. El valle de Baztan es rico en monumentos megalíticos, y para conocerlos existen numerosas opciones.
Al igual que los alrededores, los pueblos comienzan a florecer ya que las y los baztaneses tienen la costumbre de llenar sus ventanas y balcones de flores, ofreciendo así todos los pueblos un agradable paseo.
Alrededor de finales de abril tiene lugar en Elizondo la Feria de Primavera en la Plaza del Mercado de Elizondo. Si bien estuvo a punto de desaparecer, en los últimos tiempos se ha vuelto a recuperar, convirtiéndose año tras año en una cita cada vez más interesante gracias también a su mercado de productos agrícolas y artesanos del Baztan.
Con la llegada del buen tiempo los ganaderos suben el ganado a los pastizales de Belate, Erdiz y Lizartzu, manteniendo de este modo una antigua costumbre de Baztan. A lo largo de la historia, al igual que hoy, las tierras comunales de nuestro valle han servido como base de la economía local. También con el buen tiempo el cielo de este rincón del Pirineo se llena de diferentes especies de aves migratorias que año tras año siguen eligiendo nuestros montes para su viaje: excepcional oportunidad para dedicarse a su observación.
La primavera es la estación ideal para descubrir la impresionante Reserva de las Peñas de Itxusi y los valles escondidos de Aritzakun y Urritzate. A este lugar sólo pueden acceder en coche las y los baztaneses, por lo que resulta necesario recorrerlo a pie. Otro tesoro también desconocido son las turberas: Baztan es el lugar de la península donde se encuentra el mayor número de turberas, depósitos de la historia de nuestro medioambiente que en esta estación se llenan de vida.

En mayo se celebran las primeras fiestas de Baztan, concretamente las de Irurita, en torno al día de San Salvador. De esta manera se inicia el calendario festivo de los quince pueblos del Valle que se prolongará hasta el mes de noviembre. A continuación suelen ser las fiestas de Berroeta y Aritzakun, el día de Pentecostés, y más adelante se celebran las de Almandoz por Corpus Christi. En todos los pueblos las hogueras de San Juan, el día 23 de junio, cierran la primavera y dan la bienvenida al verano; las más conocidas son las de Arizkun, en las que al oír el tañido de las campanas cada vecino deposita un montón de hierba seca al lado de su casa y se saltan los fuegos recorriendo alegremente las calles Txuputo y Larrain.